El Hospital Regional Universitario de Málaga ha sido seleccionado como candidato a «Centro comprometido con la Excelencia en Cuidados» (CCEC) en la cohorte 2018-2020 dentro del Programa de Implantación de Buenas Prácticas en Cuidados cuyo objetivo es fomentar, facilitar y apoyar la implantación, evaluación y mantenimiento, en cualquier entorno de la práctica enfermera, de buenas prácticas en cuidados. Este programa surge en España del acuerdo entre tres instituciones comprometidas con la Práctica Basada en la Evidencia: la Unidad de Investigación en Cuidados de Salud (Investén-isciii), el Centro español para los cuidados de salud basados en la evidencia (CECBE) y la Asociación de Enfermeras de Ontario (RNAO).
En la actual convocatoria, el Hospital Regional de Málaga es el único de la comunidad autónoma que ha sido elegido para esta estrategia, para lo que ha tenido que elaborar un proyecto sobre el manejo de cuidados en determinados problemas de salud. Junto al centro malagueño participan otros siete hospitales de Galicia, País Vasco, Murcia, Madrid o Cataluña. En anteriores convocatorias, los Hospitales Universitarios Virgen de las Nieves (Granada) y Puerto Real (Cádiz) también participaron en este proyecto y el próximo mes de febrero, recibirán en Madrid, su acreditación final como CCEC.
El fin de esta acreditación consiste en implantar, evaluar y mantener guías de buenas prácticas en cuidados, unas herramientas que sirven para ayudar a los profesionales de la salud y a los pacientes a tomar decisiones relacionadas con un plan adecuado para unas circunstancias clínicas específicas. Asimismo se pretende impulsar las últimas evidencias en cuidados en la práctica diaria enfermera.
El director de Enfermería del hospital malagueño, Cipriano Viñas, asegura que esta metodología «supone poner a disposición de los profesionales las herramientas necesarias para incorporar estas buenas prácticas de cuidados basadas en la evidencia en su práctica diaria provocando un enriquecimiento de la práctica profesional y mejorar en la cohesión del trabajo multidisciplinar. Para los pacientes se espera mejorar en el cuidado y seguridad así como en los resultados en salud», asegura. Además, Viñas afirma que esta selección supone «es un claro reconocimiento a la calidad de los cuidados que se prestan en el Hospital Regional de Málaga y al trabajo que con tanto esmero realizan los profesionales de Enfermería de este Hospital».
Guías de buenas prácticas en cuidados
El Hospital Regional de Málaga se ha comprometido a que, en los tres años que dura el periodo de validación, implantará cinco guías de buenas prácticas para que, una vez concluya el año 2020, pase a ser considerado como Centro Comprometido con la Excelencia en Cuidados y se incluya en la red nacional de hospitales de CCEC.
Las guías están relacionadas con los cuidados en la: prevención de caídas y lesiones derivadas de las caídas en personas mayores, cuya responsable es la coordinadora de cuidados de Medicina Interna, María Teresa Moyano; valoración y cuidados de los adultos en riesgo de ideación y comportamiento suicida, cuyo responsable es el coordinador de Salud Mental, Juan Antonio García Sánchez y sobre cuidados y mantenimiento de los accesos vasculares para disminuir las complicaciones, un manual que estará llevado por la enfermera de la Unidad de terapia Intravenosa, Ana Carmen González.
Asimismo, habrá una guía sobre el cuidado y el manejo de los cuidados en personas con ostomía, que tendrá dos responsables: la Enfermera de Prácticas Avanzada, Ana Carmen Montesinos y el supervisor de Urología, Juan Antonio Cuenca. Por último, habrá una dedicada a la valoración y manejo de las úlceras de pie diabético, de la que se ocupará la enfermera responsable de esta consulta en el Hospital Regional, María José Palomo. El proyecto estará coordinado en su totalidad por la Dirección de Enfermería del centro.
El proceso de acreditación, que comenzará el próximo enero, contará con la participación directa de alrededor de 30 profesionales. El director de Enfermería del Hospital Regional afirma que la implantación de las buenas prácticas «va a afectar a la práctica totalidad de la plantilla, ya que hay dos guías muy transversales: la de prevención de caídas y los cuidados de los accesos vasculares, que afectan a muchos profesionales de las unidades de gestión clínica del centro». Además, en cada guía va a existir una comisión de implantación que estará formada por profesionales sanitarios de estas unidades, tanto enfermeras como técnicos de cuidados de enfermería e, incluso, médicos.