Trabajadores sociales de Atención Primaria del Área de Gestión Sanitaria del Campo de Gibraltar, responsables de la Dirección de Enfermería, Técnica de Promoción de la Salud y participantes en los Grupos Socioeducativos (GRUSE) han participado en un encuentro de mujeres organizado por la Unidad de Prevención, Promoción y Vigilancia de la Salud de esta Área con el objetivo de compartir experiencias.
Los GRUSE son una estrategia grupal socio-educativa de aprendizaje de habilidades emocionales que pretende desarrollar talentos y recursos de las personas para que afronten de forma saludable las dificultades de la vida cotidiana y que las dote de factores protectores para la salud mental. Están orientados a mujeres entre 30 y 65 años, sin patología específica de salud mental, con déficit en el apoyo familiar o social que acuden a consulta por quejas inespecíficas o somatizaciones que le generan sufrimiento. En ese sentido, se incluyen a mujeres con complicaciones sociales o personales que actúen como factores de riesgo para un problema de salud mental, o con presencia de acontecimientos vitales estresantes que configuren un claro factor de riesgo en personas vulnerables.
Son grupos de entre 8 y 15 mujeres, que se reúnen en sesiones de hora y media cada semana con un total de ocho sesiones que se realizan en los centros de salud conducidas por un trabajador social.
Se accede al grupo a través de los profesionales de la Unidad de Gestión Clínica, que realizan la derivación a la unidad de trabajo social de salud que será el referente y el conductor del grupo, aunque también cabe la posibilidad de acceso por iniciativa propia de la mujer dirigiéndose al propio trabajador social.
En el caso del Campo de Gibraltar, hay tres Unidades de Gestión Clínica que desarrollan estos grupos, que son muy bien valorados por las asistentes. Así, las participantes manifiestan que consiguen resolver mejor sus problemas, tienen mayor autoestima, ganan asertividad y desarrollan nuevas habilidades personales que las ayudan a adaptarse a cada situación y superar las dificultades que antes las aislaban socialmente. En paralelo, se hace un uso más racional de los medicamentos, se mejora la sintomatología y se reducen las visitas tanto a los centros de salud como a las consultas de Salud Mental.
Fuente: SAS