Este estudio realizado en Barcelona por Josep Oriol Casanovas-Marsal y Montserrat García Martínez del Hospital Universitario Sant Joan de Reus y el Departamento de Enfermería de la Universitat Rovira i Virgili de Tarragona, puede motivar que en la práctica enfermera se tenga en cuenta el punto de vista del paciente, en este caso, niños y niñas que asisten a procedimientos simples de punción intravenosa. Desde el punto de vista de los adultos puede tratarse de un procedimiento simple y corto, pero desde el punto de vista de los pequeños puede tratarse de algo complejo y doloroso. Permitir la presencia de sus familiares, o no. ¿Qué hacer?
ABSTRACT:
Objetivo: valorar si la presencia de los progenitores disminuye el dolor y el estrés de sus hijos e hijas durante la punción venosa, y si su presencia durante el procedimiento disminuye su propia ansiedad.
Método: ensayo clínico, controlado y aleatorizado con dos grupos de asignación. Muestra de 150 niños entre 1 mes y 14 años a los que se les realizó una punción venosa, 75 acompañados de sus progenitores (PP) y 75 con padres ausentes (PA). Se evaluó el dolor de los niños mediante escalas de valoración adaptadas a grupos de edad y el estrés con la Escala de Groningen. La ansiedad de los progenitores se evaluó con el cuestionario de ansiedad STAI. Se realizó análisis comparativo de las tres variables en función del grupo de asignación (media y desviación estándar –DE–). Se llevó a cabo análisis multivariante mediante regresión lineal para valorar el efecto de la presencia de los progenitores sobre los niveles de dolor y estrés de los niños y niñas.
Resultados: 150 sujetos de estudio (grupo PP n= 75 y grupo PA n= 75). La mediana de edad en el grupo PP fue de 3 años y en el grupo de PA fue de 5 años, presentando los grupos de asignación diferencias estadísticamente significativas en relación a la edad del niño/a (p<0,05).
La media de dolor en niños/as del grupo PP fue de 4,8 (DE: 2,8) y del grupo PA fue de 3,8 (DE: 2,2). La media de estrés en niños/as del grupo PP fue de 2,9 (DE: 1,5) y del grupo PA fue de 2,2 (DE: 1,5), con diferencias estadísticamente significativas entre grupos de comparación para dolor y estrés (p< 0,05). La media de ansiedad en progenitores del grupo PP fue de 37,5 (DE: 4,5) y del grupo PA fue de 37,5 (DE: 4,5), sin diferencia estadísticamente significativa
(p> 0,05). La edad y el éxito en la venopunción está asociada al dolor y la edad se relacionó con la ansiedad del niño/a.
Conclusiones: la ansiedad de los progenitores no se ve modificada en ningún grupo. El dolor y estrés de los pequeños en el grupo de progenitores presentes es superior que en el grupo de progenitores ausentes, asumiendo que la edad de los niños y niñas en el grupo de PP es menor que en el grupo de PA. La edad de los niños y niñas y el éxito de la venopunción influye en el dolor y la edad es un condicionante del estrés en los niños y niñas sometidos a una venopunción.
Para acceder al artículo, haz clic aquí